Comer queso podría compensar el daño causado por la sal a los vasos sanguíneos

Miércoles, 05 Mayo 2021

Los amantes del queso tienen un motivo para estar de enhorabuena. Al menos es lo que se desprende de una investigación a cargo de expertos de la Universidad de Penn State (EEUU), que asegura que los antioxidantes que se encuentran naturalmente en el queso pueden ayudar a proteger los vasos sanguíneos del daño causado por los altos niveles de sal en la dieta.

Para llegar a esa conclusión, analizaron a 11 adultos sin presión arterial alta y los dividieron en cuatro grupos: uno que siguió una dieta baja en sodio y sin lácteos; otro con una dieta baja en sodio y alta en queso; otro con una dieta alta en sodio y sin lácteos; y uno con una dieta alta en sodio y alta en queso. Las dietas bajas en sodio hicieron que los participantes consumieran 1.500 miligramos de sal al día, mientras que las dietas altas en sodio incluyeron 5.500 miligramos de sal por día.
Y los resultados del trabajo, publicado en ‘The Journal of Nutrition’, indican que cuando los adultos consumían una dieta alta en sodio, experimentaron disfunción y menos relajación de los vasos sanguíneos. Pero, cuando los mismos adultos consumieron cuatro porciones de queso al día, el equivalente a 170 gramos, junto con la misma dieta alta en sodio, no experimentaron este efecto.

“Si bien hay un gran debate para reducir el sodio en la dieta, para muchas personas es difícil. Posiblemente poder incorporar más productos lácteos, como el queso, podría ser una estrategia alternativa para reducir el riesgo cardiovascular y mejorar la salud de los vasos sin necesariamente reducir el sodio total”, explica Billie Alba, principal autora de la investigación.

Por su parte, Lacy Alexander, profesora de Penn State, asegura que la conexión entre los productos lácteos, incluso los quesos con alto contenido de sodio, y una mejora de la salud cardiovascular están demostradas. “Los estudios han demostrado que las personas que consumen la cantidad recomendada de porciones de lácteos cada día generalmente tienen una presión arterial más baja y una mejor salud cardiovascular en general”, explica la experta.

“Queríamos ver esas conexiones más de cerca, así como explorar algunos de los mecanismos precisos por los cuales el queso, un producto lácteo, puede afectar la salud del corazón”, añade Alexander.

Capacidad antioxidante del queso

Billie Alba asegura que si bien los investigadores no pueden estar seguros de que los efectos sean causados por un nutriente específico en el queso, los datos sugieren que los antioxidantes presentes en él pueden ser un factor contribuyente.

“El consumo de altas cantidades de sodio provoca un aumento en las moléculas que son perjudiciales para la salud de los vasos sanguíneos y la salud general del corazón. Existe evidencia científica de que los nutrientes a base de lácteos, específicamente los péptidos generados durante la digestión de las proteínas lácteas, tienen propiedades antioxidantes beneficiosas, lo que significa que tienen la capacidad de eliminar estas moléculas oxidantes y, por lo tanto, proteger contra sus efectos fisiológicos perjudiciales”, concluye la investigadora.